Francia – Paris
Nos fijamos en él por primera vez en la 12ª temporada de Top Chef, gracias a sus platos originales y coloridos y a su estilo de preparación preciso y artístico. Una vez liberado de esta camisa de fuerza televisiva, el joven prodigio Thomas Chisholm ha abierto su restaurante Chocho para ofrecernos una cocina atrevida y razonada en un ambiente cálido con grandes mesas de madera, una cocina abierta, tarros de fruta y verdura fermentando en estanterías que llaman la atención de los comensales.
Nada más llegar, optamos por sentarnos en la barra, cerca de la activa y sonriente brigada del Chef, un equipo de gente joven, apasionada, concentrada y relajada… La carta se basa en el modelo catalán, con platos al estilo de las tapas en referencia a los orígenes del Chef un cocinero al que le gusta compartir.
Comenzamos nuestra experiencia culinaria con dos entrantes, uno vegetal, zanahoria glaseada con naranja, emulsión de pistacho, zumaque, perfectamente dominado, la zanahoria, apenas crujiente por fuera y derretidamente suave por dentro, es un plato reconfortante y casi regresivo gracias a una combinación de sabores originales y explosivos. El otro entrante, más yodado, ostras escalfadas con grasa de tocino, vinagre de charcutería y limón confitado, nos impresionó por su delicadeza y atrevimiento. Una auténtica explosión en el paladar, con un equilibrio perfecto y el frescor que aporta el limón para deleitar el paladar.
Estamos impacientes por pasar a los platos principales, dada la exigencia de los platos que acabamos de degustar…
Luego viene el primer plato, patatas confitadas, salsa de ajo de primavera, pommes pailles, huevas de trucha, que combina dulzura y carácter, potencia y generosidad. A continuación, el segundo plato, hígado de ternera al perejil, una verdadera obra de arte creativa en la que la carne ha sido cuidadosamente cubierta por una especie de crumble vegetal y floral que invita a saborearla. La cocción del hígado de ternera era perfecta, y el sabor asertivo y pronunciado, una verdadera delicia.
Por último, terminamos con uno de los 3 postres de la carta, el Happy Hour, a base de malta, cerveza y cacahuetes, ¡un favorito absoluto! Una vez más, las combinaciones son atrevidas pero perfectamente dominadas, todo un arte.
Chocho
54, Rue de Paradis
75010 Paris