París es una ciudad llena de sorpresas para los visitantes. Uno de estos recientes descubrimientos es la Maison Kapunka, un enigmático establecimiento que ha conquistado los corazones de parisinos y viajeros exigentes por igual. Una cantina tailandesa creada con la idea de ofrecer una cocina de bistrot en forma de platos tradicionales tailandeses.
Desde la calle, los olores se cuelan por la puerta, invitando a los transeúntes a entrar en un ambiente atemporal y refinado, diseñado por Studio Lizée Hugot. La decoración es a la vez íntima y urbana, con platos ideados por la chef Barbara Lecestre en colaboración con los cocineros tailandeses que han estado con Kapunka desde el principio. En la mesa, las recetas se pueden compartir con los amigos o la familia para vivir una experiencia única.
Por un lado, el restaurante ofrece cocina de autor con opción sin gluten y, por otro, cócteles de autor para un viaje directo a Tailandia. El menú incluye huevos marinados con apio de tamarindo, brochetas de pollo glaseadas con salsa Sataya Goma y lágrimas calientes de ternera marinada rociadas con lima para un sabroso momento de convivencia…
Esto promete ser un viaje sin fin por el sabor, ya que el restaurante muestra la abundancia de las tradiciones culinarias tailandesas. Cada preparación cuenta su propia historia, combinando hábilmente métodos heredados del pasado con interpretaciones modernas.
Con su apertura este verano, Maison Kapunka se convierte en el cuarto espacio del grupo y ya está dejando su impronta en el paisaje parisino. Un punto de encuentro donde la cocina se transforma en una forma de expresión artística, mientras los sabores exóticos se funden armoniosamente con el ambiente urbano. Un lugar para disfrutar.
Maison Kapunka
1 bis, rue Paradis, Paris 10e