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FRANK HORVAT

Si revolucionó la fotografía de moda dando nueva vida a los modelos ensimismados y esculturales de la preguerra mediante la irrupción de un “espíritu de reportaje” vivo, humorístico y desenfadado, nunca dejó de renovarse y experimentar, hasta el punto que se le acusó de perder el rumbo y se le reprochó su excesivo eclecticismo… Del fotoperiodismo de sus inicios al “reportaje imaginario, onírico, ficticio” que explota los recursos irreales de la imagen digital a través de sus series Bestiaire o Chimères, que combinan el realismo y lo maravilloso, en los años 90, de la fotografía de calle a la investigación plástica de su serie Vraies Semblances (1980-1986) que imita los grandes retratos femeninos de la pintura occidental, Franck Horvat nunca se ha dormido en los laureles. Incluso parece que ha concebido su práctica fotográfica como un eterno reinicio… 

Dos años después de su muerte, a la edad de noventa y dos años, se le rinde un homenaje a través de unos 250 grabados realizados durante sus primeros quince años de carrera, de 1950 a 1965. Además de las fotografías icónicas que aparecieron en Vogue y Harper’s Bazaar después de que revolucionara la fotografía de moda con sus “escenarios naturales”, varias de sus primeras fotografías muestran la intensidad de una mirada, la de un “fotógrafo del cuerpo y de lo íntimo”. Una intensidad que a veces roza la teatralidad mediante el uso de planos cerrados acentuados por efectos de grano que dan a las siluetas una presencia, una realidad casi táctil.

Stéphanie Dulout

Exposición en el Jeu de Paumes
Château de Tours
37000 Tours – www.tours.fr

Hasta el 30-10-2022

https://we.tl/t-q3LI5KIqt0