En la costa oriental de la isla de Rodas, donde confluyen dos placas tectónicas, una falla crea una ruptura en el paisaje desértico. Es a lo largo de esta incisión natural donde el estudio de arquitectura Arístides Dallas ha imaginado un proyecto hotelero que nos hace pensar en una segunda piel sobre este maravilloso terreno. Inspirándose en la historia centenaria de este insólito paisaje, el estudio quiso proponer un concepto de alojamiento turístico contemporáneo centrado en la experiencia de la vivienda y en la comprensión de su historia. Las habitaciones tipo loft ofrecen una vista encantadora del mar y el acantilado. Tanto es así que la majestuosa hendidura permanece siempre en el punto de mira. Un proyecto sorprendente que fue elogiado en la 9ª Bienal de Jóvenes Arquitectos Griegos…
Yaël Nacache