Partager l'article

ORLAN  

Iconoclasta

Hacer de su cuerpo “un lugar de debate público”: esta es la vocación iconoclasta que ORLAN se dio a sí misma hace casi sesenta años. Fotografías, vídeos, esculturas, instalaciones, performances, metamorfosis corporales e hibridaciones virtuales… es así que ha hecho un manifiesto de su obra y de su vida. 

Un manifiesto feminista y subversivo por derecho propio, como cuenta la exposición retrospectiva (diseñada con la artista) en el Museo de los Mataderos de Toulouse.

Jugando con las sombras dibujadas por la torsión de los miembros en su serie fotográfica Corps-sculpture (1964-1967), dando a luz a un clon andrógino sobre una sábana blanca (ORLAN accouche d’elle-même, 1964) o posando como una Venus botticelliana o la Gran Odalisca de Ingres (1977) en “tableaux-vivants” que revisan los cánones académicos y las posturas fetichistas asignadas a las mujeres en el curso de la historia del arte, Desde el principio, ORLAN hizo del “espacio del cuerpo” (interpretado y fotografiado) su medio, tanto como material, como instrumento, como soporte, como materia, sujeto y objeto.

Escultura corporal

En 1964, a los diecisiete años, empezó a actuar en la calle, caminando a cámara lenta, en su ciudad natal, Saint-Etienne. Fue en 1966 cuando afirmó su deseo de emanciparse del arte tradicional circunscrito al espacio bidimensional del lienzo pintado, en una fotografía llena de humor con valor de manifiesto: La tentación de salir del marco con la cara descubierta, donde la vemos, desnuda, salir de un marco rococó. A continuación, no dudó en venderse en los mercados en pequeñas piezas (fotografiadas) y en exhibirse [vestida] en su propia desnudez (fotografiada), entre 1976 y 1977. Punto de no retorno y de gran escándalo, fue en ese mismo año 1977 cuando ofreció, en la escalinata del templo del arte comercial (el FIAC), en el gran paño semiabierto de una santa y puta barroca, su Baiser de l’artiste (Beso del artista) por cinco francos (para deslizarlo como ofrenda en su tronco desnudo de Madonna de feria): una blasfemia que la haría famosa. Y desde entonces fue su credo.

Morphing, fusion, self-hybridation…

Artista transmedia, jugando con todo tipo de transgresiones, llegará a entregar su carne en manos de cirujanos encargados de remodelar su plasticidad según los criterios de la belleza ideal encarnada por las diosas de Botticelli o Leonardo da Vinci, en el transcurso de una serie de operaciones-performances quirúrgicas teatrales (transmitidas en directo). Una profanación suprema de este “arte carnal”, haciendo del cuerpo, “cosido” y “suturado”, “un ready-made modificado”, una “auto-creación”… Un proceso de “desfiguración y refiguración” destinado a desbaratar “la máscara de lo innato” y a captar el flujo de identidades posibles y múltiples… Un proceso de “desfiguración y refiguración” destinado a desbaratar “la máscara de lo innato” y a captar el flujo de identidades posibles y múltiples…, que el artista -que luce sienes sobresalientes desde su última operación (en 1993)- proseguirá, en particular, en autorretratos digitalizados, Self-Hybridations, fusionando escarificaciones, tatuajes, máscaras o deformaciones… con su propio rostro reconfigurado. 

Robot o con piel 3D, los avatares de ORLAN son numerosos. Una obra en curso, ahora entregada a la manipulación genética y a la biotecnología, a la inteligencia artificial y a la realidad aumentada, enteramente dedicada al transhumanismo…

Exposición Manifeste ORLAN. Cuerpos y esculturas

Disponible hasta el 28 de agosto

Les Abattoirs – FRAC Occitanie Toulouse – www.lesabattoirs.org

Para ver también:

Exposición: Mujeres guerreras, mujeres en combate

Con la participación de, Corinne Borgnet, Céline Cléron, Rachel Labadie, Olga Kisseleva, Myriam Méchita, Brigitte Ziegler, Aïda Patricia Schweizer… et ORLAN 

Disponible hasta el 7 de mayo

Topographie de l’art – rue de Thorigny, Paris, III – www.topographiedelart.fr

Autobiografía d’Orlan Strip-tease, tout sur ma vie, tout sur mon art, ediciones Gallimard, junio de 2021

 Stéphanie Dulout