Situado en la rue de Clichy, el Casino de París, templo del music-hall y de la fiesta desde hace más de 140 años, celebra la apertura del restaurante Mistinguett, una mesa en homenaje a su líder de revista. La Miss, como la llamaban, triunfó en sus inicios junto a Maurice Chevalier, en un París que temblaba bajo las bombas.
El mítico local fue retomado por un equipo de apasionados empresarios: Malou, alias Magali Faure, de Marsella, llegó a París en 2011. Tiene 23 años y se une a su padre, propietario del Casino de París. Con su primo Benjamin Demay, lanzaron Varion Productions, una empresa que descubre a los nuevos reyes de la comedia, como Maxime Gasteuil, Redouane Bougheraba y Jérôme Niel. Este dúo consiguió convencer al grupo Lagardère para que les permitiera utilizar el mezzanine y así montar un restaurante… Es el comienzo de la aventura.
En la carta, el Chef Etienne Daviau se decanta por los pequeños productores y los productos excepcionales. Ofrece una cocina de bistró chic, generosa y precisa, acompañada de un servicio francés.
Comenzamos nuestra degustación con el Huevo de mar y mousse de verduras, un huevo perfecto cocinado a 64°, envuelto en pan de oro y servido con setas blancas y jugo de pollo asado.
A continuación se sirven los grandes clásicos, a elegir entre el rodaballo o el filete de Saint Pierre, plato para compartir en el día, así como una costilla de buey o ternera en croûte. Elegimos el filete de Saint Pierre cocinado en meunière con sus tallarines de espárragos verdes crudos, magistralmente cocinado y potente en boca.
De postre dudamos durante mucho tiempo entre el servicio de tres quesos o el Comme un fraisier, decidimos probar los dos. Una auténtica delicia.
Acompañamos nuestra cena con un cóctel, el “Zizi Jeanmaire” elaborado con ginebra y sirope de pera.
Además de estos deliciosos platos, nos sumergimos en un ambiente teatral y silencioso, con 130 plazas. El local ha sido remodelado por el dúo de arquitectos Hugo Vince y Adèle Nourry, fundadores del Atelier Ha. Este decorado con aires de los locos años veinte está situado en lo alto de la escalera del casino de París y tiene vistas a la sala Napoleón III. Los arquitectos se inspiraron en los archivos en blanco y negro del legendario restaurante Le Perroquet, con lámparas de araña de cristal emplumado procedentes de Murano y muebles hechos a medida.
Nuestros ojos y nuestro paladar están de fiesta. ¡Pruébalo ya!
Mistinguett
16, rue de Clichy, Paris 9e
Flora di Carlo
