¿La sciura? Esta figura fantaseada de la mujer milanesa madura, que luce a diario pieles y dorados, fue invitada al corazón del último desfile de Trussardi.
Sus dos directores artísticos, Benjamin A. Huseby y Serhat Işık, querían explorar la yuxtaposición, la fricción, confrontando conceptos con los que no se sienten necesariamente cómodos, con motivo de su colección Otoño-Invierno 2023. Optaron entonces por descodificar y recodificar esa silueta tan característica de la capital lombarda, que frecuenta los barrios y las calles cercanas al Palazzo Trussardi alla Scala.
La colección presenta siluetas y códigos de archivo reelaborados con un toque moderno más evidente. El satén Duquesa y el nailon tienen el aspecto y el tacto del cuero líquido, un guiño al material fundacional de la casa, especializada originalmente en guantes de cuero.
La paleta de colores va del marrón al arándano, pasando por el crudo y el burdeos. Con reminiscencias de los tapices descoloridos que suelen encontrarse en los palacios de las ciudades, el tradicional jacquard gobelino se inspira en las históricas representaciones italianas de galgos y se encuentra en chaquetas con cuellos voluminosos, bolsos de gran tamaño y falda de manta.
Además, los abrigos de lana Casentino, un tejido que se remonta al siglo XIV, se modernizan con exageradas siluetas de reloj de arena y cuellos oversize. Los abrigos nórdicos de nailon revestido tienen un brillo similar al cuero.
Un abrigo de piel sintética de color avellana -la firma de Sciura- aparece en un modelo masculino. Un bello homenaje a esta innegable figura milanesa.
Milán – Italia
https://www.trussardi.com/fr/fr
Lisa Agostini
