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El elogio a la delicadeza de Carsten in der Elst

Durante la última edición de “3daysofdesign”, el festival de diseño danés, el diseñador de muebles y artesano alemán Carsten in der Elst presentó su primera exposición “Soft Works” en la galería Tableau, en el corazón de la capital escandinava. Como su nombre indica, esta instalación es una oda a la suavidad. Para darle vida, el joven creativo radicado en Colonia pasó más de dos meses investigando sobre materiales blandos. Su investigación se puso en práctica en el mundo del diseño de interiores a través de una exposición presentada en Copenhague.  ¿El resultado? Una imprimación de materiales, tanto naturales como sintéticos, temporales y permanentes, reciclados e intactos. Un batiburrillo que cuestiona nuestra relación con la comodidad, con la constancia de los materiales, pero también con el contacto. En el diseño de sus piezas, el artista,  se ha obviado el proceso de acolchado tradicional para favorecer la suavidad. Sólo se han conservado las piezas que hacen hincapié en lo maleable. 

Entre las creaciones más sorprendentes está la cama “Aluskin” de aluminio y espuma, así como este sillón blanco, esta mesa de centro de fibra de madera y látex, y también la muy incongruente “Accession Chair” tapizada con tubos de látex. Algunas de ellas, que sugieren lo efímero, están llenas de poesía, como estas sillas y taburetes de corcho cuyos contornos se desmoronan, así como esta lámpara de cera que parece derrumbarse. 

https://inderelst.com/

Lisa Agostini