A un tiro de piedra o en el fin del mundo, cuatro santuarios de paz para recuperar el aliento y el rumbo.
Atoles Retreat en la isla de Santorini en Grecia



Como una caverna, este nuevo proyecto de la agencia griega Stone & Walls consta de cinco suites y una villa excavada en la roca y cuenta con una piscina infinita y vistas a la caldera y al mar Egeo. El único toque de fantasía proviene del color vino, que contrasta con los tonos naturales.
Hoshinoya Bali en Indonesia



A un mundo de distancia del frenético Bali, este paraíso zen se extiende sobre una espesa selva tropical y un mítico río cuyo suave murmullo se escucha por doquier, desde el maravilloso spa, pasando por las 30 villas de inspiración japonesa, hasta los espectaculares miradores suspendidos en el aire sobre el valle.
Ser Casa Sandra en la isla de Holbox, México



Al llegar a la isla, entre el Mar Caribe y el Golfo de México, se abandonan los zapatos… y las preocupaciones. El sublime entorno natural, el lujo sencillo y el espíritu bohemio y chic de este complejo de 17 habitaciones y villas decoradas con obras de arte, contribuyen al bienestar y al rejuvenecimiento.
Almières Retreat en Lozère, Francia



Recientemente inaugurado en el entorno salvaje y aislado de las Grands Causses, este ecolodge de desintoxicación digital organiza talleres (naturopatía, automasaje, etc.) y retiros (basados en el yoga, la meditación, los baños de sonido, la cocina vegetal, etc.)… experiencias únicas, que se disfrutan según las estaciones.
Céline Baussay